
El vocero presidencial, Manuel Adorni, relativizó este viernes la polémica en torno al Banco Nación, tras la preadjudicación de un contrato por casi $4.000 millones a Tech Security SRL, una empresa de seguridad vinculada a la familia del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. Consultado durante su habitual conferencia de prensa por Radio Con Vos, Adorni sostuvo que el tema “ya está agotado” y lo atribuyó a una “operación periodística”.
“Creemos que es un tema ya agotado y que la insistencia se trata de una operación”, señaló Adorni ante la pregunta por la contratación a una firma ligada a los Menem. La periodista Silvia Mercado difundió la declaración vía redes sociales y remarcó que el Banco Nación aún no emitió ningún comunicado oficial sobre la situación. Solo hubo una breve mención del titular de la entidad, Daniel Tillard, durante su visita a la Exposición Rural.
La controversia gira en torno a la licitación pública que el Banco Nación otorgó a Tech Security SRL para proveer servicios de vigilancia en su sede central y otras cuatro dependencias, incluyendo la sucursal de Aeroparque Jorge Newbery. El contrato fue publicado en el Boletín Oficial el 4 de julio y asciende a $3.933 millones. Tillard defendió la elección de la empresa al considerarla “un proveedor tradicional” de la entidad estatal, con más de una década de experiencia y “la mejor oferta económica”.
El vínculo con Martín Menem genera cuestionamientos: el actual presidente de la Cámara Baja figuró como socio de Tech Security hasta el 6 de diciembre de 2023, apenas días antes de la asunción de Javier Milei. Desde su entorno aseguran que ya no integra la firma, que quedó en manos de su hermano, Adrián Menem.
Fundada en 2005, Tech Security SRL brinda servicios de seguridad en eventos, instituciones y predios públicos y privados. Entre sus clientes figuran River, Racing, la AFA y la Biblioteca Nacional. Según su sitio web, emplea a más de 500 personas.
Mientras tanto, el Banco Nación sigue adelante con un fuerte ajuste: cerró varias sucursales en el interior y apunta a un rediseño de su estructura operativa. En ese contexto, el millonario contrato con una empresa vinculada al círculo político más cercano al oficialismo generó suspicacias que, por ahora, el Gobierno prefiere desestimar.