
Alejandro Bercovich calificó como un “terremoto político” la derrota de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires, en una elección que sorprendió por la alta participación. Según el periodista, la apatía de otras jornadas quedó atrás y lo que dominó fue “la bronca, que hizo erupción por el escándalo de las coimas”.
Para el conductor de Pasaron Cosas, la elección bonaerense fue también un plebiscito contra el ajuste: “La provincia de Buenos Aires es el territorio sacrificial de la política económica de Javier Milei. Su campo, su industria, su comercio, es lo que atacan las políticas de la ultraderecha subdesarrollista”. Esa bronca, sostiene, terminó corporizándose en Axel Kicillof: “Lo que ganó ayer fue un freno a Milei que se expresa en la figura del gobernador”.
El resultado dejó secuelas dentro del propio peronismo. “La dimensión de la victoria de Axel Kicillof también salda de alguna manera la interna que le planteaban quienes hasta el sábado a la noche especulaban con cómo podía impactar este resultado”, analizó Bercovich. Y remató: “La pelea por la interpretación de la paliza de anoche también la ganó Kicillof”.
Bercovich advirtió que la derrota abre un frente delicado en la economía: “Lo que ocurrió ayer era el escenario que JP Morgan describía como de baja probabilidad: la victoria aplastante del peronismo. Y ese escenario implicaba suba del riesgo país, suba del dólar hasta el techo de la banda y la obligación del Banco Central de vender reservas. Todo eso pasó”.
En ese contexto, el desafío inmediato pasa por los mercados: “Son 34 ruedas bursátiles hasta el 26 de octubre, después de que en la semana pasada en cinco ruedas se fumaron 600 millones de dólares. Va a depender de cómo reaccione Milei frente a esta derrota estruendosa”. La pregunta, concluyó el periodista, es si el gobierno podrá sostener su programa económico o si el “freno” bonaerense obliga a recalcular.