
Alejandro Bercovich advirtió que la reforma laboral enviada por el Gobierno representa un giro histórico en contra del trabajo y prepara un aumento drástico de la desigualdad. Según planteó, “constituye el ataque institucional del capital al trabajo más profundo y más fuerte desde el golpe militar de 1976”, y abre un escenario que -de aplicarse- hundirá aún más a quienes ya están por fuera de la protección laboral.
Bercovich insistió en que el nuevo articulado va mucho más allá de lo que se había filtrado en borradores. Subrayó que “es un golpazo para los que solo tenemos nuestra fuerza de trabajo para vender, es una forma de aplastar cualquier intento de protesta futura contra condiciones muy chotas en las cuales pretenden que trabajemos de acá en adelante”.
El periodista también planteó que hay “una acentuación de la desigualdad a nivel planetario realmente pasmosa”. Y lo conectó con el impacto ambiental, citando que “el 10% de las personas más ricas del mundo representan el 77% de las emisiones globales de carbono”
Por otro lado, Bercovich sostuvo que la reforma laboral implica una transferencia directa de ingresos desde los trabajadores hacia los sectores más concentrados. Señaló que “cuando achican el aporte para las obras sociales de un plumazo… le están poniendo directamente la mano del bolsillo al laburante”. Y advirtió que, si la ley avanza tal como está, “esas obras sociales van a dar peor si se aprueba esto el año que viene cuando empiecen a recibir menos guita”
Hacia el final, trazó una línea histórica sobre los ciclos de desigualdad en la Argentina y alertó por el momento actual. Remarcó que “en 2024 hay un salto fuerte hacia arriba del ingreso del 10 por ciento de mayores ingresos y un derrumbe muy tremendo de la mitad más pobre de la población”. Y cerró: “El proyecto que finalmente blanquea el gobierno es que van por todo, que tienen una agenda realmente arrolladora para hacer mucho más injusto un reparto que ya es muy injusto”