
Alejandro Bercovich criticó el cierre de listas para las elecciones legislativas de octubre y advirtió que la falta de entusiasmo en la gente refleja una crisis política profunda.
En ese sentido, el conductor de Pasaron Cosas opinó que que lo que ocurre en las provincias que ya votaron este año, con una baja participación cercana al 50% del padrón, “es un síntoma de crisis que antecedió a este cierre de listas”. Al respecto, sostuvo que “no parece que la democracia atraviese su mejor momento” ya que “nadie se desvive por votar”.
“La pregunta es si esto pasa por los candidatos o si pasa otra cosa”, planteó Bercovich y agregó que “más que lo viejo y lo nuevo”, lo que pasa en las urnas es lo “rancio”, entendido como algo que se está pudriendo, algo que está en crisis, “que se está deteriorando”.
Sobre La Libertad Avanza, Bercovich subrayó que “la cabeza está bien clara, la dirección es una sola, la jefatura es la de Karina Milei por delegación de Javier Milei”. Sin embargo, cuestionó la falta de renovación en las listas: “Se impusieron los nombres que quiso Karina, pero se nutrió esa cantera de viejos dirigentes que ya no le generaban gran atractivo al electorado, como Cristian Ritondo o José Luis Espert”.
El peronismo, según el periodista, tampoco se destacó por sus candidatos: “Uno lo ve a Itai Hagman, que no figura entre los posibles candidatos más conocidos, o a Mariano Recalde, que ya fue candidato en varias oportunidades en la Ciudad fallidamente. Tampoco es viejo de edad, pero expresa algo agotado en un peronismo que parece jugar a media máquina”.
En contraste, Bercovich rescató “algunos detalles de frescura” que se presentaron de manera aisalada. Por ejemplo, la diputada cordobesa Natalia de la Sota sorprendió con una lista propia. También destacó a Caren Tepp en Rosario, con propuestas como una empresa pública de alimentos y a jóvenes dirigentes de izquierda como Josué Plevich.
Para el cierre, expresó: “Esta dirigencia política parece empecinada en que el electorado le siga dando la espalda a las elecciones, en que la asistencia a las urnas se mantenga baja como se mantuvo durante todo este año. La crisis va a seguir ahí mientras tanto y no sabemos cuándo va a estallar. El problema es que mientras tanto, esos lastimados por la motosierra que no encuentran una traducción electoral que los entusiasme, van a seguir siendo lastimados. Perdón, vamos a seguir siendo lastimados”.