
En su editorial de este jueves en Radio Con Vos, Ernesto Tenembaum cuestionó el discurso económico de Javier Milei, con especial énfasis en la inflación, la apertura comercial y el funcionamiento del Congreso. A lo largo de su análisis, el periodista expuso las inconsistencias del relato oficial y advirtió sobre los riesgos de un enfoque dogmático en un contexto económico y social cada vez más frágil.
Tenembaum puso el foco en la manera en que el presidente va modificando sus explicaciones sobre la inflación, mientras el fenómeno persiste y el IPC no disminuye a los niveles prometidos. También cuestionó la defensa cerrada de una apertura económica “indiscriminada” y repasó lo ocurrido en Diputados con la votación del Presupuesto, durante la cual el oficialismo logró la luz verde al proyecto global pero sufrió un revés con el Financiamiento Universitario y la Emergencia en Discapacidad.
Inflación y un relato que se cambia con el tiempo
Uno de los ejes centrales del editorial fue la evolución del argumento presidencial sobre la inflación. Tenembaum recordó que Milei había asegurado que, una vez eliminado el déficit y la emisión, la inflación caería rápidamente, con un rezago estimado originalmente entre 18 y 24 meses. Sin embargo, ese plazo ya se cumplió y la inflación continúa en niveles elevados.
Según señaló, el Presidente ahora estiró ese horizonte a 26 meses, apoyándose en estudios académicos para justificar que la baja definitiva llegaría recién hacia mediados o fines del año próximo. Para Tenembaum, este corrimiento permanente de los plazos erosiona la credibilidad del discurso oficial, sobre todo cuando los datos muestran que la inflación no solo no desaparece, sino que en los últimos meses incluso dejó de desacelerarse.
Además, advirtió que el relato libertario subestima variables clave como el dólar y el impacto de la tasa de interés sobre los costos, factores que muchos economistas consideran determinantes en la dinámica inflacionaria actual.
Apertura económica sin matices y riesgo para la industria
Otro tramo fuerte del editorial estuvo dedicado a la defensa que hace Milei de una apertura comercial total, presentada como un mecanismo automático para mejorar la productividad, bajar precios y subir salarios. Tenembaum cuestionó esa mirada extrema y recordó que en prácticamente todos los países desarrollados existen distintos grados de protección, estímulos estatales y políticas industriales activas.
En ese sentido, señaló que pasar de un esquema con excesos proteccionistas a una apertura irrestricta puede tener consecuencias graves sobre la industria nacional. Citó datos recientes sobre la caída de la capacidad instalada —especialmente en sectores como el textil— y advirtió que el cierre de fábricas no solo afecta a los trabajadores directos, sino a toda la cadena productiva y al consumo.
Para el conductor, el problema no es discutir la necesidad de reformas, sino hacerlo desde una lógica binaria que desconoce la complejidad de la economía real y las experiencias históricas del país.
El editorial cerró con una reflexión más amplia sobre el modelo de país que propone el Gobierno. Tenembaum señaló que el Presupuesto y las decisiones económicas dejan ganadores claros —como el sector financiero y las grandes energéticas— y perdedores evidentes, entre ellos el sistema educativo, científico y los jubilados.
En ese marco, planteó que el debate de fondo no es solo técnico, sino político: qué rol debe tener el Estado, cómo se protege el entramado productivo y quiénes pagan los costos de las decisiones económicas. Una discusión que, lejos de estar saldada, seguirá ocupando el centro de la escena en los próximos meses.