
Ernesto Tenembaum se refirió a los dichos de Javier Milei ayer en la Expo EFI sobre la marcha de la economía y a sus habituales expresiones agresivas, cargadas de referencias a los “mandriles” y otra clase de adjetivos despectivos. El periodista reflexionó sobre la forma en que el presidente cambia continuamente sus dichos y pronósticos, ajustándolos a la marcha de la realidad, y trazó un paralelismo con 1984, la novela distópica de George Orwell.
Tras escuchar las constantes referencias al sometimiento sexual que utiliza Milei para defender su discurso contra el de sus opositores, Tenembaum comentó que “algo en la vida le pasó para decir esto” y llamó la atención sobre “la reconstrucción permanente de la historia” que hace el mandatario: “Muy 1984”, calificó el conductor de YAQPA.
En concreto, recordó cómo, antes del 14 de abril -cuando se oficializaron el acuerdo con el Fondo Monetario y la salida del cepo para personas físicas- el Estado estaba permanentemente perdiendo reservas, pero el presidente y su entorno aseguraban que el déficit de cuenta corriente “no iba a existir” y que la situación se solucionaría.
Pero “ayer Milei dijo por primera vez ‘no me importa que haya déficit de cuenta corriente, que se vayan los dólares’“, destacó Tenembaum. Es decir que, incluso cuando sus partidarios y otros economistas consideraban un problema la posibilidad de que hubiera déficit, y el presidente lo reconocía asegurando que no lo habría, ahora “le da una vuelta más a esto y dice que no importa”.
“A mí me da pánico”, sostuvo el periodista y advirtió sobre la posibilidad de que “un día” la situación económica colapse: “Él va a explicar que le estalló todo por otra razón, por los kukas, por Guzmán, lo que sea”. Y añadió: “Puede pasar que, en tres meses, el tipo cambie todo y explique que en realidad no dijo lo que todos escuchamos que dijo. Hace dos años este mismo personaje te explicaba por qué podía dolarizar, y al final no dolariza y empieza a reescsribir la historia hacia atrás”.
“Milei hace todo el tiempo una reconstrucción del pasado de esa manera“, concluyó Tenembaum, recordando que eso mismo hacía el personaje principal de 1984 cuando el Gobierno erraba sus pronósticos y fallaban sus políticas.