En una sesión que tuvo el respaldo del kirchnerismo, la UCR y el PRO, el Senado de la Nación rechazó este jueves las candidaturas de Manuel García-Mansilla y Ariel Lijo, ambos propuestos por Javier Milei para integrar la Corte Suprema de Justicia.
Las postulaciones no alcanzaron los dos tercios necesarios. García-Mansilla obtuvo 51 votos en contra y 20 a favor, mientras que Lijo recibió 43 rechazos, 27 adhesiones y una abstención. Con este resultado, la estrategia del Gobierno quedó en suspenso.

El caso de García-Mansilla es el más complejo. Ya juró como juez “en comisión” tras un decreto del Ejecutivo, lo que abre una disputa sobre su permanencia en el cargo. Apenas terminada la votación, el juez federal Alejo Ramos Padilla dictó una cautelar para impedirle firmar como miembro de la Corte hasta que se resuelva su situación.
En el caso de Lijo, el desenlace es más claro. La propia Corte Suprema determinó que no puede asumir en comisión mientras mantenga su cargo como juez federal. Tras la votación, Lijo envió un escrito a Ramos Padilla en el que dejó en claro su postura: “No voy a renunciar a mi cargo actual y mi interés es que el Senado me otorgue el acuerdo correspondiente”.