Como cada semana, los jubilados volvieron a concentrarse frente al Congreso para reclamar por sus derechos. Esta vez, la movilización buscaba avanzar hacia Plaza de Mayo, pero se topó con un fuerte cordón policial que generó momentos de tensión. Hasta el momento, se reportaron dos personas detenidas.
La Policía Federal impidió el avance y mantuvo a los manifestantes sobre las veredas. En medio de gritos e insultos, se registraron empujones y forcejeos con los efectivos. Desde las organizaciones convocantes denuncian que se trata de una maniobra sistemática del gobierno para frenar la protesta social.
En este sentido, Romina Manguel y el equipo de No Dejes Para Mañana dialogó con Nicolás Caroipresi, Dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y parte del consejo directivo de la UTEP, quien además fue víctima de la represión de este miércoles.

“Fue todo muy rápido y muy violento. Había muchas personas mayores y nosotros lo único que quisimos hacer fue frenar el cordón que avanzaba como una topadora, como si no hubiese personas en el medio”, contó Caroipresi, quien además resaltó la sistematicidad y brutalidad del operativo policial de todos los miércoles, con la única salvedad de que hoy “agregaron un vallado en el Congreso”.
“Es intolerable la actitud de la policía. Directamente van a golpear jubilados”, agregó el dirigente social.
“Nos venimos ajustando y ahora nos reprimen”
El reclamo principal gira en torno a la situación crítica que atraviesan los jubilados: la pérdida del poder adquisitivo, la quita de medicamentos y el aumento de la violencia institucional.
“Miércoles a miércoles se intenta impedir nuestro legítimo y constitucional derecho a la protesta con grandes y costosos operativos de las fuerzas de la ministra Bullrich que no ahorran bastonazos, atropellos y gases”, denunciaron en un comunicado conjunto difundido por las organizaciones de jubilados.

También advirtieron sobre la represión a periodistas, reporteros gráficos y dirigentes políticos que se solidarizan con la causa: “Ni siquiera se salvó el compañero Pablo Grillo, que todavía lucha por su vida tras ser alcanzada por un disparo de gas en la cabeza”.
Consignas y apoyo popular
Entre los carteles y cánticos de la jornada se repitieron consignas como “No al pacto de Milei con el FMI” y “Aumento ya de jubilaciones y salarios”. Esta vez, además, la UTEP se sumó con una consigna especial: recordar al Papa Francisco.
La protesta ocurre en un contexto de creciente represión. La semana pasada, al menos 116 personas resultaron heridas durante distintos operativos de seguridad, incluyendo una niña de 13 años, un joven de 16, un reportero gráfico y el diputado jujeño Alejandro Vilca.
“Nos quitaron los remedios, nos recortaron los haberes y ahora quieren quitarnos la calle. Pero no vamos a aflojar”, advirtió uno de los voceros de los jubilados. Y cerró: “Esto no es sólo por nosotros, es por las generaciones que vienen”.